Apoyando a las madres lactantes en el trabajo

Angelina Perna Chaux, IBCLC

Un día en la vida de una mamá lactante

Las madres lactantes enfrentan numerosos desafíos en su día a día. Esto es lo que pasa por la vida de las madres lactante que trabajan.

Por la noche y la madrugada, se despiertan varias veces para dar el pecho a sus bebés y algunas, atender a otros hijos, incluso a extraerse leche. Esta falta de sueño que se acumula tras el paso de los días, semanas, meses y años, hace que las madres se levanten cansadas. Enfrentan las rutinas diarias agotadas y la extracción de leche se vuelve todo un desafío.

Cabe mencionar que la madre que trabaja debe tener una rutina establecida para la extracción de leche, ya que debe realizarse varias veces al día para mantener la producción y evitar problemas de salud en los pechos, como obstrucción y mastitis. Esto implica dedicar entre 15 y 30 minutos cada vez y sumando significativamente al día laboral. La extracción de leche puede ser una tarea agotadora para una madre que trabaja debido a varios factores físicos, emocionales y logísticos.

Las mañanas están llenas de actividades como levantarse y arreglarse para poder organizar y llevar a los niños al colegio. Ademas de preparar el desayuno, manejar enfermedades, visitar al médico, llevarlos a su clases de estimulación, terapias y al parque. Además, se enfrenten con los afanes de la vida, como las situaciones características del hogar, los problemas familiares y por último, lidiar con el transporte público o tráfico, lo que incrementa su nivel de estrés.

En el trabajo las cosas no mejoran

Una vez en el trabajo, la situación no mejora. Las madres afrontan una carga laboral significativa, con muchas tareas por hacer, reuniones y supervisores que demandan su tiempo. Uno de los mayores retos es encontrar tiempo y espacio adecuado para la extracción de leche. Las salas de lactancia suelen estar lejos, incluso en algunos lugares simplemente no existen. La falta de privacidad o el tiempo limitado puede hacer que esta tarea sea estresante. Esto puede afectar negativamente la producción de leche y su estado emocional, generando sentimientos de desmotivación y la percepción de no ser suficientes.

Además, pueden sufrir acoso y comentarios negativos de sus compañeros de trabajo. Todo esto suma a la doble labor de la higiene del equipo de extracción para guardar la leche varias veces al día. Lo que vine a enseñarle es lo que poco se conoce de las ventajas que puede llegar a ser una madre lactante para una empresa.

¿Qué factores hacen que la extracción de leche sea una tarea demandante?

Utilizar un sacaleches puede ser demandante, y encontrar un espacio adecuado para la extracción en el lugar de trabajo puede ser complicado. Además, transportar y limpiar el equipo de extracción es un esfuerzo adicional. Emocionalmente, la presión de extraer suficiente leche y las interrupciones en el trabajo pueden causar estrés y ansiedad, exacerbados por la falta de comprensión y apoyo de colegas y supervisores.

Logísticamente, integrar las sesiones de extracción en una jornada laboral ocupada puede ser difícil, especialmente si no hay acceso a salas de lactancia adecuadas. El estrés y la fatiga pueden afectar negativamente la producción de leche, aumentando el riesgo de problemas de salud para la madre y el bebé.

Para aliviar esta carga, las empresas deben implementar políticas de apoyo, educar y sensibilizar al personal, facilitar acceso a equipamiento adecuado y ofrecer flexibilidad laboral. Con el apoyo adecuado, es posible crear un ambiente de trabajo más saludable y productivo para todos.

¿Por qué los empleadores deben apoyar a las madres lactantes?

Las empresas no solo están para generar ganancias, sino también para crear un ambiente de trabajo saludable y productivo. Apoyar a las madres lactantes ofrece beneficios tangibles y significativos.

Primero, reduce el ausentismo, ya que los bebés amamantados suelen ser más saludables, resultando en menos días de ausencia para las madres. Además, disminuye los costos de salud al reducir problemas de salud mental y física tanto para las madres como para sus bebés.

Crear un ambiente de apoyo atrae y retiene a empleadas valiosas, reduciendo los costos asociados con el reclutamiento y la formación de nuevo personal. Las madres lactantes apoyadas son empleadas más comprometidas y productivas, ya que sufren menos estrés. Esto también aumenta la lealtad hacia la empresa, pues las empleadas valoran el apoyo recibido. Además, mejora la reputación de la empresa, que es vista de manera positiva por su compromiso con el bienestar de sus trabajadoras. Este entorno de trabajo también promueve la equidad, permitiendo que más mujeres sigan trabajando y contribuyendo a la economía, lo cual resulta en un incremento en las ganancias de la empresa.

Lo básico para apoyar a las madres lactantes

Para apoyar adecuadamente a las madres lactantes, es esencial permitir pausas razonables para la extracción de leche, proporcionar un lugar privado y adecuado para esta tarea. El espacio dedicado debe contar con electricidad, agua limpia y refrigeración para almacenar la leche, todo en un mismo lugar. Es crucial que este espacio no sea un baño, ya que no es higiénico y nadie comería una comida preparada en un baño. En lugar de esto, se debe disponer de un cuarto multipropósito, libre de personas enfermas, para asegurar la comodidad y seguridad de las madres.

Ganancia de apoyar a madres lactantes en el trabajo

Apoyar a las madres lactantes en el trabajo no solo es una buena práctica ética y social, sino que también trae múltiples beneficios tanto para las empleadas como para los empleadores. Entre las principales ganancias se incluyen la reducción del ausentismo, ya que los bebés amamantados tienen un sistema inmunológico más fuerte y enferman menos, reduciendo así la necesidad de que las madres falten al trabajo.

Además, la lactancia materna contribuye a la salud física y mental de las madres y sus bebés, lo que se traduce en menores costos médicos y de seguros para la empresa. Un ambiente de apoyo reduce el estrés y la ansiedad en las madres lactantes, mejorando su bienestar emocional y físico.

También se mejora la retención y atracción de talento, ya que un ambiente de trabajo que apoya la lactancia es más atractivo y ayuda a reducir los costos asociados con la rotación de personal. Las madres que se sienten apoyadas y valoradas tienden a estar más comprometidas y ser más productivas, lo que a su vez mejora la moral general de los empleados y fomenta un ambiente laboral positivo y colaborativo.

Además, las empleadas que reciben apoyo durante la lactancia son más leales a su empresa, reduciendo la rotación y los costos de reclutamiento y formación de nuevos empleados. Apoyar la lactancia materna mejora la imagen pública de la empresa, posicionándola como un empleador que valora y respeta a sus empleados, y destacándose como líder en responsabilidad social corporativa.

Un beneficio para ambas partes

Al proporcionar las condiciones necesarias para que las madres lactantes puedan continuar con su carrera profesional, las empresas promueven la equidad de género y la inclusión en el lugar de trabajo, permitiendo a más mujeres equilibrar sus responsabilidades familiares y laborales, y contribuyendo a una mayor representación de mujeres en la fuerza laboral.

Al final, apoyar a las madres lactantes en el lugar de trabajo es una inversión inteligente que beneficia tanto a los empleados como a los empleadores. Las empresas que adoptan estas prácticas no solo cumplen con sus responsabilidades sociales, sino que también mejoran su desempeño económico y su competitividad en el mercado. Todos estos beneficios, desde la reducción del ausentismo hasta la mejora de la moral y la productividad, contribuyen a un aumento general en las ganancias de la empresa.