¿Cómo transporto mi leche extraída?

Hoy en día las mujeres nos movemos por el mundo y muchas veces tenemos que dejar a nuestros bebés durante el día ya sea por tiempos cortos o largos. La vida laboral nos lo exige y es por eso que, si tu deseo es seguir con la lactancia materna, es necesario que sepas cómo extraerte la leche materna para que puedas llevarla a tu casa y abastecer así las necesidades de tu bebé.

Cuando te extraes la leche debes almacenarla y conservarla según la necesidad de consumo de tu bebé. Se deja en el refrigerador en caso de ser vaya a ser consumida dentro el tiempo permitido o en congelación para su uso prolongado.

Para transportar la leche debes tener una nevera portátil con una bolsa o bloque de hielo especial para conservar el frío. Algunas marcas de los sacaleches proveen estos accesorios y si no, se pueden conseguir empíricamente.

Trabajo

Todas las mañanas la madre debe llevar la nevera portátil con pila de hielo congelada y el recipiente adecuado para la leche extraída. En el mercado se encuentran botellas de plástico recolectoras, bolsas de plástico estériles o frascos de análisis, aunque estos últimos no son los más recomendados.

Al extraer la leche, es necesario colocar los recipientes tapados herméticamente dentro de la nevera portátil y guardarla en un lugar seguro y fresco.

En el lugar de trabajo debes mantener la higiene de los materiales del extractor. Se deben lavar con agua caliente y en lo posible también con jabón, aunque no es indispensable, y secarlos con un rollo de papel absorbente para que los tengas listos para la próxima extraída. En caso de no tener agua caliente , es importante portar un termo de agua que conserve el calor y una toalla o rollo de papel para secarlos.

Al regresar a la casa debes almacenar la leche materna cumpliendo con los estándares de conservación en refrigeración o congelador según la necesidad. (Ver Almacenamiento y conservación de la leche materna y Cómo descongelo de leche materna).

De paseo

Si tu o alguien más va a salir con tu bebé y necesitan transportar la leche materna lo apropiado es llevar consigo la nevera portátil, la pila de hielo y la leche materna para mantener así la cadena de frío.

La leche materna descongelada no debe durar más de dos horas a temperatura ambiente. Recomiendo transportarla levemente descongelada dentro de la nevera para seguir conservando sus propiedades nutricionales y su seguridad microbiológica para su consumo.

Muchas madres me preguntan que, si le pueden dar la leche fría a sus bebés y yo les respondo, “¿a ti te gusta una limonada fría?” Seguramente a tu bebé también le gusta la leche fría. En caso tal que no, la leche se puede llevar descongelada dentro de la neverita para mantener su conservación.

Guardería

Si la leche se consume en la guardería, se debe transportar la bolsa o recipiente dentro de la nevera manteniendo la cadena de frío. Habría que confirmar con el jardín sí se dispone de refrigeración para su almacenamiento. En caso contrario dejar en la nevera portátil hasta su consumo.

Si hay nevera en la guardería o jardín puedes llevar la leche congelada y refrigerarla; en caso de contar con congelador siempre puedes llevar algunas leches congeladas y manteniendo la cadena de frio (congelamiento) reservarlas para la semana. Eso lo acuerdas con las tutoras del jardín. Te recuerdo que también puedes llevarle un vaso de transición en el que le darán la leche a tu bebé.

Viaje

Si vas de vacaciones y necesitas transportar leche lo importante es hacerlo manteniéndola congelada y conservando la cadena de frío. Hay que verificar que en tu destino dispongan de refrigeración y apenas llegues, es de carácter urgente guardar de inmediato la leche en el congelador.

“La leche que transportas debe permanecer más del 80% congelada para seguir con la cadena de congelación. En caso contrario, puedes guardarla en la nevera y consumirla lo antes posible.”