Angelina Perna Chaux. IBCLC

La postura, si importa.

¿Cuántas posiciones has intentado para amamantar a tu bebé? ¿Has intentado más de una? ¿Sabes que existen varias?

Cuando hablamos de posiciones para dar el pecho siempre pensamos en una y tal vez dos. Por lo general las madres tendemos implementar las clásicas y poco nos atrevemos a intentar otras. Lo que aún no sabemos es que cada posición tiene su ventaja en relación a las situaciones que se nos presentan.

En este post les muestro cuáles son las ventajas de cada una de ellas, cuales nos ayudan aliviar dolores, corregir agarres ineficientes, solucionar obstrucciones y permitirnos descansar mejor. No existe una posición mejor que otra. Lo que debe existir es una madre y un bebé cómodo, que les permita disfrutar una lactancia plácida y tranquila.

Posición acunada

Es la posición clásica de amamantamiento y la que en nuestra sociedad, estamos acostumbradas a visualizar. Es la posición también como cargamos a los bebés y por eso se facilita a la hora de lactar.

La posición acunada la podemos hacer en cualquier momento; les puede sonar chistoso, pero es normal adoptarla ya sea sentadas, paradas y hasta caminado. ¿Quiénes han amamantado caminando y haciendo otras actividades a la vez?

Lo más importante de esta posición es cuidar que tu bebé tenga su cuerpo/barriga de frente al tuyo, su cara de frente al pecho y su cabecita ligeramente hacia atrás, todo para obtener un agarre eficaz al pecho. Puedes revisar el post, Cómo conseguir un agarre eficiente al pecho.

Normalmente, en bebés recién nacidos la cabeza debe ir soportada en el antebrazo. Con el fin de que el bebé quede alineado correctamente al pecho y la madre opte por una postura cómoda, erguida, con hombros y escápulas en su lugar, para dar inicio a un agarre eficaz.

Sin embrago, una desventaja de la posición acunada en bebés pequeños o recién nacidos es que la cabeza tiende a tambalearse en el brazo de la madre teniendo un mínimo control sobre ella. (2017, Wambach) Esto puede poner nerviosa a una madre primeriza conllevando a un pobre agarre y por ende, a presentar problemas en la lactancia.

Por eso, en caso que no haya control de su cabeza se puede optar por iniciar el agarre del pecho utilizando la próxima posición, cruzada.

En cambio, en niños más grandes, la cabeza se controla cargándolos y colocándola en la comisura del codo con esta misma posición.

Posición acunada cruzada

Esta posición es ideal cuando todavía nuestro bebé está pequeño y no pesa mucho. Permite traerlo al pecho con mayor facilidad utilizando un solo brazo, teniendo así mayor control de su cabeza al sujetar el cuello en forma de C y a la vez, dejando una mano libre para hacer un masaje, acomodarnos, hacer una comprensión mamaria y mucho mas.

Es normal que al inicio muchas madres se sientan inseguras al intentar cargar y mover a su bebé con un brazo, sin embargo, para eso está nuestro apoyo y enseñarles cómo hacerlo, y poco a poco sentirse seguras mientras aprenden. Otras madres, se les hace más fácil y lo logran instintivamente.

Igualmente te invito a conocer e intentar la posición acunada cruzada si estás teniendo problemas de agarre. Esta posición resulta muy práctica para coger nuestro pecho en forma de C, posicionar correctamente al bebé y hacer el ejercicio de apuntar el pezón a la punta de la nariz. Ayuda a corregir los problemas de acople que empiezan desde la posición. Si tienes un pecho o pezón grande, esta posición te permitirá tener un mayor control de tu bebé, de su cabeza y de tu pecho.

Posición Rugby

Esta posición también la conocemos como patilla o balón de futbol. Es ideal para bebés prematuros, de bajo peso o que no controlen aún su cabecita. También lo es para bebés múltiples o cuando el pecho de la madre es grande. Facilita observar con mayor detalle los labios del bebé y revisar si hay un agarre eficiente. Las mamás que les han realizado cesárea se benefician de su postura.

Nuestra tendencia es amamantar en la posición acunada permitiendo un mayor vaciamiento en la zona interna y baja de la glándula. Sin embrago, algunas veces olvidamos que la glándula también puede congestionarse en su parte externa del pecho. La recomendación es amamantar en posición futbol americano, rugby o patilla para ayudar a drenar la leche retenida en esa región de la glándula y evitar así, futuras complicaciones.

Es importante que el bebé esté bien posicionado y que tenga un soporte en su colita. En este caso, apoyar tu brazo un almohada o cojín de lactancia ayuda a que la posición de tu bebé y tu postura sea cómoda. Cuando la posición no lo es, las tomas pueden resultar ineficientes.

Posición Biológica

Mágica y plena.

“La posición biológica de amamantamiento no se trata solo de la lactancia materna; más bien el enfoque de si misma alienta a la madre a mantener al bebé en el lugar correcto, su habitat.”

Dr. Nils Bergman

Esta frase me la enseñó el neonatólogo y “cangurólogo”, el Dr. Nils Bergman  en uno de sus cursos. Esta posición nos enseña muchísimo, desde conectarnos y conocer mejor a nuestro bebé,  hasta brindarle seguridad, calor y alimento. Es una posición para enamorarnos y hacer fluir la oxitocina.

Cuando nace nuestro bebé y durante los primeros minutos de vida, nuestra postura inclinada o recostada, la posición boca abajo de él, el contacto piel a piel, se entrelazan para activar los reflejos primitivos y naturales que impulsan los movimientos que se necesita para la llegada al pecho, despertando el comportamiento innato de la lactancia.

Esta posición ventral es ideal para evitar problemas tempranos de agarre hasta corregir agarres poco profundos que conllevan al abandono precoz de la lactancia.

En 1996 Klaus y Kennel,

“Permite a la madre a conocer mejor a su bebé: es la primera conversación entre madre e hijo.”

Esta posición se puede hacer en una postura de la madre acostada o recostada con almohadas detrás de la espalda. El bebé se tumba encima de su madre, facilitando el contacto piel con piel, se despiertan instintos primitivos del bebé importantes para la lactancia y que muchas veces obviamos y de igual manera facilita ese primer enamoramiento.

Esta posición es ideal para corregir agarres que no son profundos ya que tenemos la gravedad a nuestro favor para favorecer la entrada más profunda del pecho en la boca de nuestro bebé.

Algunas mujeres pueden manifestar que no lo logran con éxito. Lastimosamente para aquellas con pechos grandes o implantes esta posición puede ser un poco retadora cuando aún sus bebés están pequeños. A medida que crecen ambos se van adaptando y esta posición se hace más fácil.

Recostada de medio lado

Estar tumbadas hacia el lado es la favorita de muchas madres y sus bebés por el hecho de que nos permite descansar con nuestro bebé. Es unas de las posiciones ideales para amamantar durante la noche y ambos continuar con el sueño placido y reparador.

Al principio la posición recostada hacia al lado puede ser un poco desafiante y más cuando el bebé queda mal posicionado. Igual que el resto de las recomendaciones de barriga con barriga, es necesario colocarle un rollo de toalla o cobija para que no se voltee permitiendo al bebé que no se separe del cuerpo y quede cómodo para lactar a la vez, que el peso de nuestro cuerpo esta ligeramente hacia atrás.

Es cierto que esta posición genere inseguridad entre las madres y los profesionales, no lo niego. Parte de ello es el riesgo de asfixia y eso es muy grave. Es cierto que para ello debemos tener consideraciones cuando los bebés están recién nacidos como tener un colchón duro y estable y alguien quién nos vigile y nos acompañe mientras descansamos en esta posición y el bebé crece.

Si en el momento no te sientes confiada para hacer esta posición, tranquila. Puedes intentarlo meses después. Hay mamás que lo hacen con mucha naturalidad y se sienten muy cómodas. Las recomendaciones son para todas.

Posición vertical, sentados en el cargador

La posición vertical es una posición parecida a la biológica. Es una posición natural y es la manera cómo hemos cargado a nuestros bebés en upa por millones de año en las distintas culturas y poblaciones humanas. Hoy en día seguimos observando desde comunidades indígenas hasta madres modernas porteando a sus bebés cerca de su cuerpo.

Cuando tenemos al bebé de frente o de lado tenemos dos o uno de los senos disponibles para amamantar. Solo con usar una blusa fácil de bajarla para sacar el seno es suficiente para que nuestro bebé se alimente mientras nosotras hacemos otras actividades.

Posiciones hay muchas, incluso inventadas por las propias madres o bebés. Unas más cómodas que otras, unas ideales para temas terapéuticos y otras con las que mejores nos sentimos. Como les dije anteriormente, no existe una posición mejor que otra, lo que debe existir es una mamá y su bebé cómodos, plácidos que disfrutan plenamente de la lactancia.

Mis profundos agradecimiento a la mamá Alexandra Gamboa y a su bebé, quienes nos aportaron las fotos de las posiciones de amamantamiento.