¿Con las manos o extractores?

Angelina Perna Chaux, IBCLC.

Son diversas las razones por las que debemos extraernos leche. Estas pueden ser desde empezar un banco de leche hasta, cuando estemos ausentes de nuestros bebés, para liberar tensión, ingurgitación mamaria, obstrucciones o mastitis.

Es recomendable que toda mamá aprenda las dos maneras de extracción para evitar o solucionar cualquier problema según alguna necesidad. Puedes revisar las distintas situaciones para extraernos leche.

Antes de proceder directo a la extracción de leche debemos saber que los más importante es que estemos tranquilas y relajadas, que la extracción se haga en un sitio cómodo e higiénico, y si no estamos con nuestro bebé, podemos ver una foto para estimular así nuestro sistema neurohormonal y facilitar la salida de la leche.

Preparación de los pechos para la extracción de leche

Recuerda siempre que antes de tocar o manipular nuestros pechos debemos lavarnos muy bien las manos con agua y jabón. Esto no solo favorece en conservar la calidad de la leche si no que mantenemos la higiene de nuestros pechos. 

Realizamos un masaje suave liberar la tensión de cualquier zona endurecida o simplemente ablandamos y estimulamos la glándula para favorecer la fluidez de la leche por los conductos. Los masajes son de gran importancia porque ayudan a estimular la liberación de oxitocina y prolactina facilitando así la salida de la leche durante la extracción.

Tipos de extracción

  1. Extracción manual

La extracción con nuestras propias manos se ha utilizado a través de la historia de la humanidad. Incentiva a la madre a conocer mejor sus pechos y es muy práctica. Sin embargo, hay que aprender su técnica para realizar una buena extracción y efectuar un correcto vaciamiento de los pechos.

Esta técnica es recomendada en situaciones como la extracción del calostro para así aprovechar al máximo su pequeño volumen y es recomendado recolectarlo en un vasito o cuchara. También es esencial para el vaciamiento correcto de los pechos después de haber utilizado con el extractor, ya que en algunas ocasiones los extractores mecánicos no logran extraer gran parte de la leche retenida.

Aprender a extraernos de manera manual nos ahorraría los costos de los aparatos (extractor de leche o sacaleches) y el tiempo que gastamos en su limpieza y esterilización.

  1. Extracción mecánica

A muchas mujeres se les hace más fácil y cómodo realizar las extracciones por vía mecánica, sacaleches o extractores. Sin embargo, también es importante aprender a utilizar estos aparatos, conocer sus ventajas y desventajas y saber escoger uno apropiado.

Por ser mecánico o automático, no significa que siempre sea fácil. Un mal uso de estos aparatos puede generar problemas como maltrato en los pechos, obstrucciones y mastitis.

Antes de escoger un sacaleches debes hacerte la pregunta, ¿Cuál es el objetivo de la extracción y dónde lo utilizaré?

Un buen sacaleches es aquel que drena el pecho casi por completo. Digo casi por completo, porque en realidad muchos no son capaces de hacerlo tan bien como en el caso de la extracción manual que sí logra un drenaje más efectivo.  Es por esto la enorme importancia de tener en cuenta cómo escoger un sacaleches y el tipo de sacaleches ideal para ti.

Independientemente de la forma de extracción, siempre recomiendo para los casos en que se desea vaciar el pecho, terminar con la extracción manual.